El padre que se olvidó su hijo de dos años dentro del coche, aparcado en el polígono industrial donde trabajaba, en Valls, a pleno sol y con temperaturas que rozaron los 40ºC, continúa en estado de shock tras encontrar al menor sin vida.
Tanto el progenitor como la madre del niño tuvieron que ser asistidos por psicólogos especializados. Los Mossos investigan el caso como una posible negligencia del padre.
El padre tenía que llevar al pequeño a la guardería, antes de ir a trabajar al polígono. El hombre se despistó y aparcó en la calle Manyans sin darse cuenta de que el niño estaba en la cancha, en las plazas traseras del vehículo.
Parece que fue una compañera de trabajo del padre la que vio al menor sin sentidos en el interior del coche y le avisó. El padre acudió rápidamente al coche, trasladó al menor a un lugar más fresco y prometió reanimarlo. El niño había estado encerrado en el coche cinco horas.
Ni los esfuerzos del padre ni los de los equipos de emergencia sirvieron, desgraciadamente, para revertir la situación y el pequeño acabó muriendo, muy probablemente y a la espera de los resultados de la autopsia, por un golpe de calor.
El Ayuntamiento de Valls ha decretado dos días de duelo oficial por esta trágica muerte. El consistorio ha convocado un minuto de silencio en recuerdo del niño este miércoles a las 12 horas en la plaza del Trigo.