Dos reclusos del Centro Penitenciario de Burgos están fugados desde la semana pasada tras conseguir eludir el control del grupo con el que realizaba varias etapas del Camino de Santiago, según han confirmado fuentes de Instituciones Penitenciarias y voluntarios que prestan servicio en este penal.
Estas mismas fuentes han indicado que los dos reclusos desaparecieron en un momento determinado cuando estaban realizando una de las etapas del Camino, en una actividad “habitual” que se lleva a cabo en determinadas épocas del año con personas seleccionadas que cumplen penas en la cárcel de Burgos.
El Juzgado de Vigilancia Penitenciaria supervisa cada una de las acciones que se llevan a cabo cuando los reclusos salen a hacer este tipo de salidas. La cárcel de Burgos es uno de los lugares de España donde “más y mejor” se realizan estas acciones que buscan la reinserción.
Esta actividad se ha llevado a cabo 14 veces este año y 48 en 2024 y en todas las ocasiones los participantes han vuelto a la cárcel, añaden las mismas fuentes.
Desde hace años, un grupo de voluntarios, de diferentes instituciones, desde fundaciones hasta confesiones religiosas, acompaña a los grupos seleccionados y supervisados por el juez de Vigilancia Penitenciaria de manera muy exhaustiva, tal y como destacan algunos de estos voluntarios.
Sin embargo, ante los hechos ocurridos, se ha acordado suspender todo tipo de salidas y permisos hasta el esclarecimiento de los mismos, algo que las mismas fuentes censuran por entender que al final pagan “justos por pecadores” y apuntan que no puede haber “sentencias ejemplarizantes, deben ser justas”.
Hasta ahora no ha trascendido la identidad de los dos presos huidos ni los delitos por los que cumplen condena.