A la Guardia Urbana de L’Hospitalet de Llobregat (Baix Llobregat) se le giró trabajo, durante la tarde de ayer. En una con técnicos del Servicio de Salud del Ayuntamiento, se inspeccionó un restaurante en la plaza de Milagros Consarnau que presentaba graves carencias sanitarias derivando, como medida cautelar, en el cese inmediato de la actividad hasta que se resuelvan las infracciones existentes.
Los agentes encontraron 500 kg de comida caducada y en mal estado de conservación , presencia de hongos , deficiencias de seguridad y múltiples infracciones. Ante la gravedad de los hechos, la inspección concluyó con el acta correspondiente y la clausura del local. Los 500 kg de comida caducada han sido destruidos.
Poco después, en otra actuación conjunta, se inspeccionó un bar en la calle del Montseny, el mismo en el que el pasado domingo se hizo un operativo policial conjunto con los Mossos d’Esquadra al funcionar como ‘after’ ilegal, que presentaba graves carencias sanitarias derivando, como medida cautelar, en el cese inmediato de la actividad hasta que se resuelvan las infracciones existentes.
Los agentes se encontraron con unas condiciones de salubridad inadmisibles, suciedad y múltiples infracciones como la presencia de una plaga de pandilla rubia.