La Guardia Civil ha detenido a tres personas, entre ellas los padres de un bebé que murió el pasado domingo en Roquetas de Mar, en Almería, tras sufrir una grave hemorragia como consecuencia de una circuncisión clandestina realizada en su propio hogar. Los detenidos son los progenitores del niño, así como el hombre que practicó la intervención, que no tenía formación médica.
Según fuentes oficiales de la Guardia Civil, y tal y como ha informado Europa Press, los hechos ocurrieron durante la noche del domingo, cuando el menor, de quien no se ha revelado la edad, sufrió una hemorragia masiva tras someterse a la práctica ilegal de la circuncisión. Cuando los padres se percataron de la gravedad de la situación, trasladaron al niño al centro de salud más cercano, pero lamentablemente los sanitarios no pudieron salvar su vida debido a la gran pérdida de sangre.
Los servicios de emergencias activaron el protocolo de agresión ante la gravedad de los hechos, lo que llevó a la detención de los padres y del hombre que habría realizado la operación a instancia de los progenitores. La Guardia Civil también procedió a registrar la vivienda familiar, donde se realizaron las intervenciones ilegales.
Según ha informado Diario de Almería, la familia del bebé es originaria de Mali, lo que podría explicar la práctica de la circuncisión en un contexto cultural que, en algunos casos, la considera una tradición religiosa o social. Sin embargo, en este caso, la falta de profesionalidad y las condiciones no sanitarias de la intervención derivaron en un desenlace fatal para el pequeño.
La investigación continúa abierta y se prevé que en las próximas horas se proporcionen más detalles sobre el caso. El cuerpo del bebé ha sido trasladado al Instituto de Medicina Legal (IML) de Almería, donde se le practicará la autopsia.
Los tres detenidos, que se encuentran bajo custodia de la Guardia Civil, serán puestos a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 6 de Roquetas de Mar. Mientras tanto, continúan recogiéndose pruebas y declaraciones como parte de las diligencias del caso.
Este trágico suceso ha conmocionado a la comunidad local y ha puesto de manifiesto los peligros que conlleva la realización de intervenciones quirúrgicas fuera del ámbito médico autorizado. La Guardia Civil ha instado a la ciudadanía a denunciar cualquier práctica ilegal o que ponga en peligro la salud de los más pequeños.